Margarita ¿Dónde te ubico?

Venecia Joaquín
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Me imagino el aturdimiento del Presidente Leonel Fernández, cuando fue llamado “gran padre de la educación dominicana”. El calificativo se lo dio la candidata vicepresidencial del PLD, Margarita Cedeño, frente a un grupo de jóvenes en el salón ‘Las Cariátides’ del Palacio Nacional. Ha sido el peor momento para decirlo. El 34% de los niños y jóvenes del país no trabajan ni estudian. Todos los sectores están pidiendo al menos un 4% del PIB para mejorar la deteriorada calidad de la educación. Llueven denuncias sobre falta de aulas y del estado calamitoso en que se encuentran las existentes. Muchas semidestruidas, sin terminar, sin baños, con filtraciones, carentes de equipo, energía eléctrica, agua, etc. En un mismo salón funcionan tres y cuatro niveles diferentes. Alumnos recibiendo clases debajo de árboles, sentados en el suelo. Los maestros sin incentivos en salarios ni para su capacitación. La mayoría de los estudiantes en escuelas públicas, son muy pobres. Necesitan del desayuno escolar que con frecuencia, los intoxica. Esta es una pincelada del retrato físico de las escuelas.

En cuanto a la calidad de la educación, amerita una revisión más profunda. Hicieron una inversión de 800 millones en textos integrados que luego descalificaron. ¿Con que criterios los prepararon?.¿Que perseguían?. No lo sabemos. Solo conocemos de la realidad ante descrita y de miles de niños que no asisten a las escuelas porque no pueden satisfacer las necesidades básicas. Viven en casuchas, desnudos, con hambre.

¿Es el Presidente del PLD el gran padre de esta barbaridad?. Lo dijo su esposa, la Primera Dama. No me había detenido a pensar en esto. Con este llamado, la Sra. Cedeño hace un tremendo aporte para reflexionar. Ha sido una luz, el timbre de un despertador para el pueblo, su partido y candidato, Danilo Medina. ¿Planea continuar este modelo?.

Comienzo a pensar que detrás de los costosos trajes, maquillajes y sonrisa fija, en Margarita hay una mujer capaz de decir cosas interesantes, para poner el cerebro a trabajar, a pensar. En medio del escenario con el desastre educativo, destaco quien fue su progenitor y le llamo gran padre. ¿Una bofetada con guantes de seda?. No se me hubiese ocurrido. O ¿Acaso estabas pensando como la esposa del dueño de la Fundación Global?. En ese caso, diría que es verdad. Ha sido un gran padre para ella desde que la estableció en su primer periodo gubernamental. Es la institución educativa y cultural más costosa y moderna del país. Sin embargo, como buena madre, ella debió controlar esta emoción.

Si como candidata vicepresidencial ha visitado barrios pobres y ha visto niños deambulando que no pueden asistir a las escuelas, por su rol como Primera Dama desde hace once años, debió sentirse avergonzada. Los hijos han estado sin protección. Cuando el padre falla o toma un camino equivocado, dándole prioridad a cosas materiales, superfluas, privilegiando grupitos y descuidando la mayoría, los empuja a la delincuencia. Una buena madre, debe hacerlo reaccionar. Insistir en que cambie las prioridades a este hogar o partido político. Hablar claro. De nada vale riqueza física, lujos, metros, bulevares, si los hijos mueren de hambre y sumergido en la ignorancia. Margarita tiene once años de matrimonio con el poder. Dice que han tenido un gran padre en educación. Me decepciona. No lo han tenido. Los resultados están ahí. Se lo que es educar. Me duele que no les den oportunidades a niños y jóvenes para que se preparen y vivan mejor. Ella debe reconocer ese error, esa deficiencia, ese vacío en su gobierno.

Debería pedir, con claridad y valentía, que hoy comiencen los cambios. ¡Es cruel lo que han hecho con la juventud al frenar el desarrollo de la educación! La humillan y convierten en mendigo. ¿Planearon mantener la ignorancia para manipular al pueblo?. Me resisto a creer esa crueldad. Entiendo que ni Danilo ni Margarita podrán hacer cambios significativos. Su posición es difícil. Están entre flechas. No obstante, creo que capte lo que hay implícito en el ahogado mensaje de Margarita: La juventud está huérfana. Necesita con urgencia un papa que se ocupe de ella, que le proporcione estudio, trabajo, paz y alegría.