domingo, 21 de diciembre de 2014

21 DE DICIEMBRE DE 1963: EL DÍA QUE FUSILARON A MANOLO TAVÁREZ JUSTO Y SUS COMPAÑEROS

Una versión da cuenta de que Manolo Tavárez Justo y sus compañeros fueron arrestados en el momento que iban a entregarse desarmados acogiéndose a una promesa del Gobierno de facto del Triunvirato que había prometido respetarles las vidas si abandonaban las armas. Sin embargo, sus captores los fusilaron en el lugar de la detención.

La versión de Tulio H Arvelo

El historiador Tulio H Arvelo, publicó la versión que da cuenta del acto de fusilamiento y echó por el suelo la versión del Gobierno de facto de que el grupo de guerrilleros que acompañaba a Manolo Tavárez Justo, murió en combate.

Arvelo, explica los hechos en una historia que publicó en la Revista Ahora, número 737 del 26 de diciembre del 1977, en las páginas 65, 66, 67 y 68. En contenido es el siguiente:

El 21 de diciembre de 1963, el Dr Manuel Aurelio Tavarez Justo (Manolo), y catorce compañero más perecieron en Las Manaclas. Inmediaciones de San José de las Matas a manos de efectivos del Ejército Nacional. Según el parte oficial el grupo murió en combate. Pero sus compañeros sobrevivientes aseguran que fueron asesinados después de rendirse atendiendo un llamado que hizo por la Radio el ingeniero Manuel Tavares Espaillat, miembro del Triunvirato en el poder prometiendo que se le respetaría la vida. Tavarez Justo y sus compañeros habían iniciado un foco guerrillero el 26 de noviembre de 1963, conjuntamente con otros cinco grupos que operarían en La Horma. Berrenda. Bahoruco. El Limón y Los Quemados, diseminados en el Norte, en el Este y en el Sur del territorio nacional.

El motivo de la acción estuvo claramente expuesto en la Proclama al Pueblo, al decir "la hora llama a la restitución y mejoramiento del régimen constitucional derogado por el golpe de Estado".

Se refiere a la asonada que derrocó el gobierno constitucional del Presidente Juan Bosch el 25 de septiembre de 1963.

La proclama no limita el alcance del movimiento a esos objetivos. Considera que esas metas enriquecen las perspectivas de la revolución que nosotros auspiciamos. Más adelante aclara este concepto cuando dice ´y transformado este combate constitucional y antigolpista en una resistencia por la revolución reivindicadora que es nuestra misión fundamental.

El foco guerrillero de Las Manaclas, estaba compuesto por 29 combatientes de los que solamente ocho salvaron la vida. A través de relatos de los sobrevivientes se conocen los últimos momentos en la vida de los mártires del 21 de diciembre del 1963. Aunque hay divergencia en sus versiones, todos coinciden en que a última hora decidieron acogerse a las garantías del ingeniero Tavárez Espaillat.

Estaban agotados

Un informe de Luís Peláez, sobreviviente de Las Manaclas, rendido a la dirección del Movimiento Revolucionario 14 de Junio (1J4), publicado en la edición del 26 de febrero de 1973 de la revista ¡AHORA!, dice que el día 19 el estado de la tropa era de agotamiento progresivo. Los comestibles se habían terminado y los esfuerzos para abastecerse eran inútiles porque habían fallado las medidas tomadas antes de subir a las montañas.

Los almacenamientos de provisiones habían desaparecido y las bodegas y carnicerías instaladas en lugares estratégicos habían sido incautadas por el Gobierno. El día 20, sigue el informe, castigados por el hambre y el frió se planteó por primera vez considerar las garantías dadas por el Ingeniero Tavarez Espaillat. En una reunión celebrada en la noche, la mayoría opinó que debían acogerse a ellas.

Cinco se opusieron aduciendo el temor de que las intenciones de los militares golpitas fueran contrarias a las aparentemente expresadas por el miembro del Triunvirato. Tampoco Tavárez Justo, era partidario de la entrega. La reunión se disolvió sin que se llegara a un acuerdo. La decisión final se tomaría al día siguiente. El 21 a las cinco de la mañana ya estaban en pie.

Aunque no se hizo una nueva reunión formal, las conversaciones entre grupos habían convencido a Tavárez Justo a decidirse por la entrega. Con esa adhesión comenzaron los preparativos para rendirse a las autoridades.

A las 10.30 a.m., a José Daniel Ariza, Luís Peláez, Josesíto Crespo, Polón y Pitifia, los cinco opuestos a la rendición, se les permitió marcharse.

En una entrevista hecha al doctor Emilio Cordero Michel, sobreviviente del grupo, en el número seis de la Revista ¿Qué?, en 1971, hay más detalles de las últimas horas de los héroes y mártires de Las Manaclas.

La rendición

Se acordó que la rendición se haría de día y ante un oficial del Ejército. Se comisionó a un grupo comandado por Cordero Michel e integrado además por Leonte Schott Michel, Alfredo Peralta Michel, y Juan Ramón Martínez (Monchi) para que fueran a arreglar la entrega. A las cinco horas de camino se encontraron con un jeep del que se apearon dos soldados armados de ametralladoras. Uno abrió fuego matando en el acto a Schott Michel, a Peralta Michel y a Martínez. Cuando el soldado homicida recarga su arma para disparar sobre Cordero Michel, que había resultado ileso de sus primeras ráfagas, el otro soldado se la quitó increpándolo de asesino y evitando que lo matara.

En esa misma entrevista está el siguiente detalle: Fidelio Despradel, Marcelo Bermúdez, Juan García Arias (Chanchán), y Domingo Bisonó (El guajiro), habían abandonado el grupo de Manolo del 15 al 16 a cumplir una misión. Eso salvó la vida a los tres primeros. El guajiro murió al ser reconocido en una bodega por el segundo alcalde del lugar. Allí fue herido de una puñalada. Despradel, Bermúdez y García fueron capturados más tarde. Los caídos en Las Manaclas fueron: Dr. Manuel Aurelio Tavárez Justo, Ing. Jaime Rafael Ricardo Socias, Dr. José Cabrera González, Juan Ramón Martínez (Monchi), Jesús Antonio Barreiro Rijo (Tony), José Daniel Fernández Matos, Ing. Rubén Díaz Moreno (Rudy), Agr. Domingo Sánchez Bisonó, Manuel de Jesús Fondeur (Piculín), Leonte Antonio Schott Michel, Fernando Arturo Ramírez (Papito), Antonio Filión (Manchao), Caonabo Abel Manuel de los Santos Reyes Díaz (Reyito), Alfredo Peralta Michel (Alfredito), Francisco del Carmen Bueno Zapata, Rubén Alfonso Marte Aguayo (Fonsito).

En la Horma, entre San José de Ocoa y Valle Nuevo, murieron: Hipólito Rodríguez Sánchez (Polo), Jefe del grupo de los Quemados, Adolfo González y Negro Rodríguez de Jesús. En esa misma zona fueron capturados: Arsénico Ortiz Fernández (cubano), Francisco Peralta Trinidad, Arturo Romero, José Rafael Pérez Modesto, Gonzalo Pérez Cuevas, José Altagracia Suazo, y la Dra. Carmen Lora Iglesias (Piky)

En Loma Colorada, jurisdicción de San Francisco de Macorís, fueron capturados: José Chaljub Mejía, Luís Adolfo Domínguez, Dr. Abel Rodríguez del Orbe, José Anibal Guzmán, Cruz Peralta y Homero Hernández, (este último sería muerto años después por una patrulla de la Policía Nacional, en una calle de Santo Domingo).

En el Calvario de Nagua, fueron capturados Manuel de Jesús Checo, Dr. Nathanael Díaz González, Emil Elías Esmurdoc Ariza, Juan Lantigua Javier, Aquiles Reynoso Paulino, Oscar Edgard Cabral Rodríguez, Ramón Euclídez Morillo Martínez y Reyes Saldaña.

En Villa Nizao, Enriquillo, capturaron a José Antonio Moquete Capell, Juan José Javier Reyes, Gil Alberto Pérez Rijo (Belisario), Lilo Coss Batista, Dr. José Dionisio Bautista Fabián, Ángel Luís Pertnella Ceballo, (de nacionalidad española), y Federico Cuello Dávila. En El Fondo, Polo, Barahona, fueron capturados el Ing. Jaime Capell Bello, Dr. Enrique Batista Gómez, José Hungría Sánchez, Raymundo Cuevas Sena y Nelio Hernández Bautista.

En la Región Este murieron: Rafael Faxas Canto (Pipe), Herniquillo Almánzar, Caqui Meléndez y Minaya Fernández. En Pedro Sánchez, fueron capturados El Dr. José Antonio Contando y Cristóbal Romás (Cristobita). En la Región Septentrional, murió Félix Jerónimo Escaño Peña y fueron capturados: Edmundo Díaz, Ing. Daniel Matías, Francisco Tello, Dr. Sostenes Peña Jáquez (más tarde muerto en el asalto a San Francisco de Macorís durante la Guerra de Abril de 1965), y el Dr. Juan Miguel Román (muerto heróicamente en el asalto al Palacio Nacional durante la Guerra de Abril de 1965).

En Los Quemados, Bonao, fueron capturados el Dr. Juan José Matos Rivera, Marcelino Grullón Jiménez, Teódulo Radhames Guerrero, Dr. Bienvenido Aquino Pimentel, Benito Alejo Germán Vargas, Arquímedes Pagán Feliz, Eduardo Rosa Aristy, Ing. Manuel Lulo, Antonio Mirabal Jiménez, Julio Lora Genao, Freddy Reyes, Marcelino Antonio Rosado, José Romero Bello Suriñach, Julio Enríquez Montandón, Marcelino Antonio Vargas Jáquez, Zoilo Batista, Hugo Alberto García Muñoz, Ángel Rafael Abud y Manuel de Regla Medrano.

El motivo del fracaso es uno de los puntos más tratados en artículos, entrevistas, y otros medios de publicidad por los sobreviviente del movimiento guerrillero. Señalan muchos de los sobrevivientes que "el aislamiento de las masas fue un factor principal que impidió el triunfo. Así como la falta de una línea política, es decir la estrategia y la táctica para desarrollar la lucha guerrillera", estas consideraciones fueron expresadas por Emilio Cordero Michel, y corroborada por Joseíto Crespo, del frente de la Las Manaclas, que comandaba Manolo Tavárez Justo.

José Daniel Ariza, otro combatiente del Frente de Las Manaclas, acorde con la falta que significó la ausencia del apoyo popular dijo que la línea política que se siguió fue incorrecta y que el pueblo es el único sabio y si le indicamos un camino errado no nos sigue, demostrándonos que estamos equivocados.

Los cadáveres de los mártires de Las Manaclas fueron enterrados en una fosa común, la mayoría de ellos fueron sacados y trasladados a las respectivas localidades de donde eran oriundos. Manuel Aurelio Tavárez Justo, fundador del Movimiento Revolucionario 14 de Junio (IJ4), y Comandante Supremo de los Frentes Guerrilleros de noviembre del 1963, reposa en el cementerio de la ciudad de Salcedo, de la Provincia Hermanas Mirabal, junto a su esposa Minerva Mirabal.

NOTA. Hemos querido refrescar la memoria a los dominicanos que vivieron esos momentos y a los jóvenes que solo le ha llegado con muchas distorsiones esta heroicas jornadas de hombres y mujeres que sintieron que la libertad de esta nación había sido mancillada por el gorilismo imperante en esa época, sintiendo el llamado de la Patria, no el llamado que se le quiere atribuir a tránsfugas. El valor de estos que ayer siguieron a unos de los hombres con mayor sentimiento y quien fuera cobardemente asesinado por las hordas sangrientas del gorilismo de ese entonces. El valor de aquellos al igual que los inmortales de las jornadas de Constanza, Maimón y Estero Hondo. Recordemos siempre a nuestros héroes. (Tulio H Arvelo)

1 comentario:

  1. Esas informaciones son las mismas que recibí de parte de uno de los sobrevivientes de ese memorable e importante acontecimiento histórico. Me refiero a José Daniel Ariza Cabral. José Daniel Ariza Cabral fue hijo del General José Daniel Ariza y Amada Cabral Reyes.Amada era hermana de Máximo Cabral Reyes, quien murió en combate frente a las tropas norteamericanas, el 3 de julio de 1916 en la Batalla de la Barranquita, donde Mao y todo el pueblo dominicano pusieron muy en alto el honor de la patria,

    Antonio Mateo Reyes.

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