martes, 17 de mayo de 2011

En realidad, “los ricos” no “crean empleos”… ¡los consumidores creamos empleos!

Por Dave Johnson
Campaign for America's Future

Usted lo oye una y otra vez, con distintas variaciones, en un mensaje central: gravar con impuestos a los ricos mata trabajos. Se oye hablar de "las subidas de impuestos que matan trabajos", "gravar a los ricos afecta los trabajos", "los impuestos eliminan trabajos", "los impuestos sacan dinero de la economía”, "si usted grava a los ricos estos no podrán proporcionar puestos de trabajo". ...y así sucesivamente, una y otra vez.

Entonces, ¿en realidad depende de "los ricos" la “creación” de fuentes de trabajo? ¿O se crean puestos de trabajo cuando estos satisfacen una necesidad?

He aquí un ejemplo típico reciente, Obama pregona plan de impuestos eliminador de trabajos, escrito por un "Investigador principal del Cato Institute y presidente del Institute for Global Economic Growth":

Algunas personas, en su búsqueda de ganancias, benefician a otros seres humanos mediante la creación de nuevos o mejores productos y servicios y, en consecuencia, mediante el empleo de otros. A esas personas las llamamos empresarios y trabajadores productivos.

Otros son parásitos que chupan la sangre y la energía a los productores. Estas personas se encuentran con mayor frecuencia en el gobierno.


Tal vez la descripción más vívida de lo que sucede a una sociedad donde los parásitos son tan numerosos y poderosos que destruyen sus anfitriones productores se encuentra en la novela clásica de Ayn Rand, "Atlas Shrugged". ...Productores y parásitos

La idea de que hay productores y parásitos, como expresa el ejemplo anterior, se ha convertido en la filosofía central de los conservadores. Estos afirman que la gente rica "produce" y son ricos porque "producen". El resto de nosotros somos "parásitos" que chupamos la sangre y la energía del rico productivo, cuando los gravamos. En este sistema de creencias, Nosotros, la Población, somos básicamente "la ayuda" que de otro modo estamos en el medio, y gravamos a los productores para pagar por nuestros "programas sociales". Nosotros "quitamos dinero" a los productores a través de los impuestos, que son "redistribuidos" a los parásitos. Ellos repiten el lema: "Los impuestos son un robo”, y toman el "dinero que hemos ganado" por "la fuerza" (refiriéndose al gobierno).

El presidente de la Casa de Representantes, el republicano John Boehner, se hace eco de esta filosofía fundamental de "productores" y "parásitos", cuando dice:

“Creo que aumentar los impuestos a las mismas personas que esperamos reinviertan en nuestra economía y contraten personas, es una idea equivocada”. "Para esas personas, dar ese dinero al gobierno... significa que no se reinvertirá en nuestra economía en un momento en que estamos tratando de crear puestos de trabajo".

"La misma gente" que "contrata personas" no debería tener que pagar impuestos debido a que el dinero se saca de la economía productiva y simplemente se da a los parásitos - "la ayuda" -, es decir, usted y yo...
¿Es eso cierto? ¿Crean “ellos” puestos de trabajo? ¿“Dependemos” de los ricos para que “creen puestos de trabajo”?

La demanda crea empleos

Yo fui propietario de un negocio y he ocupado altos cargos en otras empresas, y conozco muchos otros que han creado y operado empresas de todos los tamaños. Le puedo decir por experiencia directa que intenté arduamente de emplear el número correcto de personas. Lo que quiero decir con esto es que cuando había un montón de clientes, añadía las personas necesarias para satisfacer la demanda. Y cuando la demanda aflojaba, debía despedir personas.

Si tenía dinero extra, no contrataba personas para sentarse y leer el periódico. Y si tenía más clientes de lo que podía manejar, eso - los ingresos generados al satisfacer la demanda adicional de los clientes adicionales - era lo que pagaría el empleo de más personas para satisfacer la demanda. Es una ecuación muy simple:

Usted emplea el número adecuado de personas para satisfacer la demanda que tiene su negocio.

Si usted pregunta a su alrededor encontrará que todas las empresas tratan de emplear el número adecuado de personas para satisfacer la demanda. Cualquier dueño de negocio o el gerente le dirá que contratan según las necesidades, no basado en lo mucho que tienen en el banco.

Los impuestos no tienen absolutamente nada de impacto en la ecuación de contratación.

De hecho, el pago de impuestos significa que el negocio está generando dinero, lo que significa que ya ha contratado el número correcto de personas. Los impuestos se basan en restar los costos de sus ingresos, y si usted tiene ganancias después de cubrir sus gastos, entonces usted puede ser gravado. Usted ni siquiera calcula sus impuestos hasta después que la decisión de contratación se ha hecho. Usted despide gente para "cubrir" sus impuestos. E incluso si despidiera empleados para "cubrir" los impuestos, eso reduciría sus gastos y usted tendría más beneficios, lo que significa que aumentaría sus impuestos... excepto que despedir a alguien cuando existía la demanda podría causar una reducción en sus ingresos,... y ¡ve lo absurdo que es asociar los impuestos con la contratación o creación de empleos!

La gente que llega a su puerta y compra cosas es lo que crea fuentes de trabajo.

Los ricos no crean empleos

Una gran cantidad de gente común que tiene dinero para gastar es lo que crea puestos de trabajo y mantiene las empresas. Esa es la idea básica de la economía de la demanda, y funciona. En una economía impulsada por el consumidor, diseñada para servir a la gente, la gente común con dinero en el bolsillo es lo que mantiene todo lo que sucede en movimiento. Y la igualdad de oportunidades de la democracia, con su reinversión en infraestructura y educación y los otros frutos de la democracia es fundamental para mantener en funcionamiento una economía de demanda.

Cuando todo el dinero va a unos pocos en las alturas, todo se viene abajo. Gravar a la gente en la parte superior y la reinversión del dinero en la sociedad democrática es fundamental para mantener las cosas en marcha.

La democracia crea empleos

Esta idea de que algunas personas adineradas -los "productores"- nos pasan todo al resto de nosotros -"los parásitos"- está fundamentalmente en desacuerdo con el concepto de la democracia. En una democracia, todos tenemos la misma voz y un mismo interés en cómo marche nuestra sociedad y nuestra economía.

Nosotros no "dependemos" de la buena voluntad de unos pocos favorecidos como medio de subsistencia.

Todos, se supone, que tenemos las mismas oportunidades y los mismos derechos. Y hay cosas a las que todos tenemos derecho - "derechos"- que obtenemos simplemente porque hemos nacido aquí. Pero todos compartimos la responsabilidad de cubrir los costos de la democracia:

Y los ricos tienen una responsabilidad mayor que el resto de nosotros, ya que reciben la mayor cantidad de beneficios.

Por eso es que tenemos "impuestos progresivos", donde las tasas aumentan con los ingresos.

Los impuestos son la savia de la democracia y la prosperidad que produce la democracia.

En una democracia, los ricos deben pagar más para cubrir cosas como la construcción y el mantenimiento de los caminos y las escuelas, porque estas son las cosas que permiten su riqueza. Ellos en realidad hacen más uso de los caminos y las escuelas porque las carreteras permiten prosperar a sus empresas y las escuelas proporcionan educación a sus empleados. Pero no es solo que los ricos usan más las carreteras, es que toda persona tiene derecho a utilizar las carreteras y el derecho al transporte, porque somos una democracia y todos tienen los mismos derechos. Y como ciudadano en una democracia, usted tiene la obligación de pagar la cuota correspondiente por ello.

Una democracia debe tener una estructura tributaria progresiva que esté en proporción a los medios de pago de cada quien. Hacemos esto porque los que reciben más del sistema lo hacen porque el sistema democrático les ofrece esa oportunidad. Su riqueza se debe a nuestro sistema y por lo tanto, ellos le deben devolver al sistema en forma proporcional. (Además, la historia nos ha enseñado la lección de que las grandes riquezas se oponen a la democracia, por lo que la democracia debe oponerse a la acumulación de riquezas grandes y desproporcionadas. En otras palabras, parte del contrato de vivir en una democracia es su obligación de proteger la democracia y los altos impuestos en la parte superior es una de esas protecciones).

La filosofía conservadora anti-impuestos del "productor y el parásito" está fundamentalmente en desacuerdo con los conceptos de la democracia (lo que ellos reconocen con orgullo) y debe ser entendido y criticado como tal. Los impuestos no "sacan dinero de la economía", estos hacen florecer la economía. Los ricos no "crean puestos de trabajo, Nosotros, la Población creamos puestos de trabajo.

Sábado, 14 de mayo de 2011

Dave Johnson (Redwood City, CA) miembro de Campaign for America's Future (la Campaña para el Futuro de América), escribe sobre política de manufacturación, comercio y economía e industria. Él es también un Senior Fellow de Renew California.

Dave tiene más de 20 años de experiencia en tecnología de la industria, incluyendo cargos de Manager General y vicepresidente de mercadología. Su carrera anterior incluyó cargos técnicos, incluido el diseño de videojuegos en Atari e Imagic. También ha sido un pionero en el diseño y desarrollo de la productividad y las aplicaciones educativas de las computadoras personales. Más recientemente, él ayudó a fundar una compañía que desarrolla sistemas de escritorio para validar el comercio del carbón en los EE.UU.


Traducción de Isaías Ferreira (metransol@yahoo.com)

1 comentario:

  1. Excelente posteo mi líder Isaías.
    Abrazo de oso para usted,

    Diomedes Rodriguez

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galley472@yahoo.com