domingo, 11 de diciembre de 2011

CORRUPCIÓN Y CORRUPTOS

El entierro del Partido Reformista
Por Sara Pérez

A modo de réquiem y lápida –en algunos casos en tono jubiloso, que es muy difícil no compartir- se han publicado diversos análisis y artículos, por el descalabre del Partido Reformista Social Cristiano, una anquilosada estructura, que muchos coinciden en dar por moribunda y que ni aún así deja de hacer daño, igual que Balaguer, su sumo sacerdote.

Recuerdo el caso particular de un dilecto periodista, que en sus crónicas televisadas durante las últimas elecciones, comentaba lo alegre que se sentía viendo la dramática reducción de votos registrada por los balagueristas, que en el 2008 obtuvieron un esmirriado 4.58%, llevando como candidato presidencial a alguien que los representaba de forma inmejorable, ese monumento nacional a la impunidad y al latrocinio que es Amable Aristy Castro.

Hay quienes dicen extrañarlos como fuerza política por los supuestos aportes a la democracia que le atribuyen, pero no todos comparten semejante nostalgia, ya que con poquísimo esfuerzo puede considerarse que si alguna democratización ha propiciado ese grupo –hoy grupúsculo- es la condición generalizada entre sus dirigentes de asaltantes del erario.

La mención de cada uno de sus "líderes" trae su propio expediente de mal manejo de fondos públicos. No hay uno solo que pueda mencionarse sin que se apaste la saliva en la boca ante el desfile de una fauna con todas las variables de una comuna de vampiros:

Quique , Putico, Licelott Marte, Ángel Lockward, Lila Alburquerque – a quien hubo que sacar por la fuerza del Congreso, por desgracia, para dar paso a otro igual que ella- y quien recientemente fue premiada por por el Presidente Fernández, por sus despojos a la patria, con una designación como embajadora en Taiwán, con lo que se evidencia lo poco que el mandatario respeta a Taiwán y lo aún menos que respeta a su país.

Precisamente, el "Ministerio" –como le llaman ahora a cada secretaría, por esa inclinación del gobierno del PLD hacia la vacuencia rebuscada- de Relaciones Exteriores es un reducto del reformismo. Lo encabeza Carlos Morales Troncoso, que ha hecho un magnífico trabajo en la manutención de esa dependencia estatal como una vergüenza nacional y una burla internacional con los miles de compatriotas y camaradas impresentables incorporados como botellas.

Muchos son delincuentes, involucrados en toda clase de entuertos (falsificación de documentos, ventas de visas y pasaportes, pillajes, fullerías, tráfico de personas y tráfico de sabrá Dios qué a través de las valijas diplomáticas) designados en cargos diplomáticos, para enojo de los países a donde los envían, que con frecuencia y por diversas razones, se niegan a reconocer formalmente su estatus diplomático.

El ventorrillismo político tiene sus notables cumbres –aunque ahí la competencia es cerrada-entre rapiñosos y truculentos diputados vitalicios como Marino –El Fracatán- Collante y Máximo Castro Silverio, que no tienen un solo voto que no hayan tenido que comprar al contado con dinero de todos nosotros.

El Partido Reformista, con su antecedente inmediato, al que heredó, el trujillista Partido Dominicano, fue la primera organización política de masas con una estricta naturaleza de asociación de malhechores. Nadie se incorporó nunca a ese partido para seguir una idea, por interés en el bienestar colectivo o por creer que un estilo de administración encauzaba por mejor ruta el destino del país. Desde su primer día se trató de una maquinaria sin sueños, sólo con ambiciones.

La mayoría de sus integrantes ha encontrado su nicho natural entre las filas del ultra derechizado Partido de la Liberación Dominicana y una ración menor está medrando a la sombra del Partido Revolucionario Dominicano. Como parte de la generalizada condición de tránsfugas, de políticos que no tienen principios, sino solo intereses, uno y otros podrán intercambiarse en cualquier momento. La hoy reducida franquicia está en bancarrota.

Lo curioso es que la organización política que fuera el puntal del conservadurismo dominicano se ha ido a pique cuando sus ideas se han expandido, conquistando e invadiendo todas las demás parcelas políticas con impacto masivo.

En ese sentido, en vez de entristecerse, debían alegrarse. Aunque la organización como tal desaparezca de nombre, su naturaleza y sus principios –el principal de los cuales es no tener principios y condescender a lo que sea para mantener el poder- se han afianzado y expandido hasta contaminar y envilecer a otras organizaciones políticas que una vez les adversaron.

Los integrantes de esta banda andan dispersos, volando enloquecidos en busca de refugio, como una colonia de cucarachas rociada con Baygon.

No deja de ser un error de cálculo y una distorsión de identidad. La confusión no es sólo de ellas, que se comportan como cucarachas amenazadas de envenenamiento, siendo como son, las triunfantes moscas de Machado:

"Vosotras, las familiares/inevitables golosas/ustedes moscas vulgares/ me evocáis todas las cosas [...] Oh! viejas moscas voraces/ como abejas en abril/viejas moscas pertinaces [...] Yo sé que os habéis posado/ sobre el juguete encantado/sobre el librote cerrado/sobre la carta de amor/ sobre los párpados yertos/ de los muertos. /Inevitables golosas/ que ni labráis como abejas/ ni brilláis como mariposas...".

El partido desaparecido no es el reformista de Balaguer, sino el de la Liberación de Juan Bosch. Este es el entierro al que asistimos.

Alguien anotaba el otro día que así como los griegos habían conquistado, con la luz de su cultura a los romanos que los dominaban militarmente, los reformistas conquistaron con su putrefacción a los peledeístas y perredeístas entre los que se han difuminado sin mayores traumas y con absoluta naturalidad.

El Señor de Las Moscas refulge victorioso. Sus enemigos no han podido con él y se le han unido.

Tomado de acento.com.do

1 comentario:

  1. Sara Përez no "manca", palabra que usábamos mucho en la Línea Noroeste.

    !Cuánta razón tienes cuando mencionas al desaparecido Partido de Juan Bosch! El ex PLD, casi E.P.D.

    Solamente quedan los recuerdos, los sueños de aquel gran hombre, de ver plasmados los ideales de otro grande de nuestra historia, de Juan Pablo Duarte.

    Y cada día que pasa esos sueños e ideales se esfuman, como nubes cargadas de agua, en las verdes montañas de esta isla preñada de políticos moscas

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galley472@yahoo.com